La transmisión oral de la «leyenda» de la Virgen del Pino se remonta a 1483, y su devoción se expresa en la talla de madera policromada procedente, supuestamente, de la escuela de Sevilla de finales del siglo XV.
Hay constancia escrita que los restos del Pino Santo se aprovecharon como «madera», y que solamente se conservan los trozos con los que se realizó la Cruz Verde, actualmente en el camarín de la Virgen, protegida por una urna de cristal.
Durante mucho tiempo, la Cruz Verde se identificaba con la situación del Pino Santo, sin embargo, parece que lo correcto es su correspondencia con la ubicación del sagrario (altar) de la segunda iglesia. Con la remodelación de la plaza del Pino en los años setenta, se trasladó la Cruz Verde y la referencia anterior ya no es válida.
Término municipal: Teror.
Localización: En la plaza de Nuestra Sra. del Pino, junto al laurel de indias, protegido por una valla con una pequeña zona ajardinada donde conserva su encanto.
Coordenadas GPS: No son necesarias.
Fuentes/Referencias:
Nuestra Señora del Pino. Historia del culto a la veneranda imagen de la Patrona de Canarias. José García Ortega Librería y Tipografía Católica (1936), Págs. 55 y 56.
Diario de Las Palmas, Vida en Teror: «En su columna, la "Cruz Verde"», Néstor Alamo, 20 de Abril de 1974, Pag. 12.
La Provincia, «Teror: La Cruz Verde», Vicente Hernández Jiménez, 1 de Julio de 1981, Pág. 3.
Canarias 7. «Vicisitudes de la Cruz Verde», Francisco Ortega Gil, 7 de Septiembre de 2001, Pag.13 (Fiestas del Pino)
Fotos: «Juegos de Niños», Luis Ojeda Pérez (1890); «Basílica del Pino», Autor sin identificar, (1864-1868); «Cruz Verde», Ricardo Pavón (1930-1940). Archivo FEDAC.
Diario de Las Palmas. Viernes Santo en Teror (1965). Crónica por Gregorio F. Rodríguez, 20 de Abril de 1965. Pág. 6, de Canarias- Actualidad.
El Casco Historico de la Villa de Teror. Vicente Hernández Jiménez, Ed. Ayto. de Teror (2002), Pág. 184.
«Las Iglesias de Nuestra Señora del Pino y las ermitas de Teror». Julio Sánchez Rodríguez. (2008) ISBN: 84-612-8808-3.
Historia: La primitiva Cruz Verde era muy sencilla: su base era un pilar donde se situaba la cruz de madera, que procedía del árbol santo.
En 1886, fue sustituida por otra de metal sobre una columna, trasladando la primera a la iglesia de Teror. En 1913, durante la construcción de la iglesia del Sagrado Corazón de Los Arbejales, la Cruz Verde (de madera) presidió las obras hasta su retorno a la Basílica, el 28 de Julio de 1924.El Dr. Víctor Grau Bassas y Mas estuvo muy vinculado a la villa de Teror, como médico y por lazos familiares: su matrimonio con la terorense, Amalia Bethencourt. Se integró en el municipio y colaboró en diversas iniciativas, una de ellas fue el impulso y suscripción para la sustitución de la Cruz Verde por otra de mayor «mérito» artístico, ayudado en la corporación por otros concejales como D. Manuel Acosta , que posteriormente ostentaría la máxima representación municipal.
La remodelación de la Cruz Verde dio lugar a un recinto vallado similar al que conocemos.
Además de la cruz de metal, se acompañaba el conjunto con las imágenes de la Virgen del Pino y del Sagrado Corazón de Jesús, con un arco oval provisto de bombillos de colores. Del laurel de indias que cobija la Cruz Verde, se desprendió un gajo que dañó la cruz y el pilar. Al reponerla, desaparecieron ambas imágenes y se reemplazaron las luces por un farolito.
Aunque han existido diversos intentos de recuperar su posición que le da «carácter y significado», solamente ha sido posible colocar una placa (en el 2006) que nos recuerda que «ya no está donde debería estar».
Resulta muy curioso y tiene gran valor histórico, la identificación que recoge Néstor Alamo de las personas que figuran junto a la Cruz Verde, en la imagen tomada entre 1888 y 1891. En ella podemos encontrar a los policías municipales: D. Ramón Ramírez Asensio y D. José Rodríguez, a Doña Dolores Acosta, conocida como la «Maestra Vieja» y al alcalde de Teror, D. Manuel Acosta y Sarmiento.
También era la Cruz Verde la última estación del Vía Crucis, de amanecida, del Viernes Santo, que fue recuperado en 1965, donde se acompañaba en solemne procesión al «Cristo Crucificado» de Luján Pérez.
A comienzos del mes de Mayo, se celebran las festividades de San José y La Cruz, patrocinadas (en sus orígenes) por el gremio de carpinteros de Teror. Estas culminan con la «Quema del Barco y el Castillo», espectáculo pirotécnico a cargo de «la saga» de los Dávila que representa los ataques piratas a la isla en tiempos pasados.
Otro de los actos conmemorativos de estas fiestas es la enramada con hojas de álamo y flores de la Cruz Verde y de la Cruz de Hoya Alta, sin embargo hay un paréntesis significativo en estas celebraciones, (Enero de 1970), cuando la Cruz Verde se vio afectada por un fuerte temporal que la derribó y no se repuso hasta Agosto del mismo año.
Estado Actual: En el 2006, el Ayuntamiento de Teror remodeló la Cruz Verde, amparado en el «Plan de Calidad Turística» de la Mancomunidad del Norte que aportó los fondos necesarios, y a la que incorporó una placa explicativa del monumento.
Agradecimientos: Al Cronista Oficial de la Villa de Teror, Jose Luis Yánez Rodríguez por su atención y aportaciones. Cuando mi desconocimiento o la duda me embarga, tengo que recurrir a fuentes de entidad: MIL GRACIAS por el asesoramiento y la colaboración prestada.
Pueden consultar una parte de sus documentos y artículos en: http://www.teror.es/cronicas.php
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Todos los verdaderos Grancanarios, te debemos a ti, una muestra de agradecimiento por el maravilloso trabajo que efectúas, dándonos a conocer nuestras costumbres y verdadera historia, para muchos desconocida.
ResponderEliminarHay muchas personas colaborando de forma anónima para recuperar testimonios orales. El origen de algunas cruces se pierde en el tiempo,... y ése es el reto,... descubrir algo que permita contarlo. MUCHAS GRACIAS.
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